La originalidad en la novela romántica

la originalidad en la novela romántica
Una de las frases que más se suelen escuchar cuando eres escritor es aquello de «todo está escrito». La romántica tiene como eje principal la relación amorosa entre dos personas y el final feliz, ahí radica la dificultad del género, en darle un punto personal y diferente a la misma historia: hacerla original.

Ya ha llovido mucho desde que el señor Grey y sus sombras revolucionaron el género con una historia (¿de amor?) que en realidad ya habíamos leído en los clásicos románticos de los años 80. La historia del millonario que seduce a la jovencita inocente está más vista que el tebeo y, sin embargo, E. L. James supo conquistar a millones de lectores en todo el mundo y provocar que otros escritores se sumaran al carro de escribir más y más de lo mismo, hasta el punto de que el mercado está saturado.

El otro día, María Montesinos hablaba en Twitter de cómo la historia de España está bastante desaprovechada por los escritores de género romántico en nuestro país. Soy la primera que cuando se decidió a escribir romántica histórica, lo hizo cogiendo la regencia inglesa como base. Tal vez porque, aunque la histórica estaba fuera de mi zona de confort, no lo era tanto por ser una época sobre la que había leído decenas de novelas y con la que podía sentirme cómoda escribiendo. Pero María tenía toda la razón. Estamos tan acostumbrados a leer lo de siempre que lo seguimos buscando, porque… ¿a quién no le gusta una buena novela de highlanders? Muy pocos se han atrevido a meterse en aguas farragosas e investigar nuestra historia para desarrollar dentro de ella una historia de amor.

Pero no solo la histórica es poco original, en paranormal parece que solo hay vampiros y en erótica, solo BDSM. En la novela romántica contemporánea los protagonistas masculinos siguen siendo -la gran mayoría, no todos- unos sinvergüenzas, en muy pocas he leído que el chico sea un hombre sin miedo a enamorarse, por ejemplo. Recuerdo que una de las críticas principales que recibí de Volver a empezar fue que el marido de la protagonista era un soso, precisamente por ser un tipo normal y corriente.

Es muy difícil saber qué gusta y que no, por qué una novela vende y otra no, independientemente de la calidad narrativa. Es el dilema eterno. Arriesgarse o no con historias diferentes, atrevidas, con personajes fuera de lo común. ¿Crees que hay sitio para novelas así dentro de la romántica?

Si conoces alguna novela romántica que sea diferente y original, que no sea más de lo mismo, dímelo en los comentarios. Me encantará descubrirla.

12 comentarios en “La originalidad en la novela romántica”

  1. Conozco varias, creo que la cuestión es esa, que se publica muchísimo y es difícil estar al tanto de todas las historias. Por ejemplo, las novelas de Marisa Sicilia, siempre te sorprenden y sus protagonistas nunca van por los caminos trillados que te esperas. De histórica en España hay más de lo que parece, tenemos novelas de Nieves Hidalgo, Nuria Llop, Pilar Cabero, Beatriz Manrique, y las mías, claro, solo por citar unas pocas. Algo diferente a todo, las dos novelas de Mauro de Yolanda Quiralte. Y más que te podría citar. Lo que sí te puedo decir es que las editoriales tradicionales apuestan poco por novelas que se salgan de la corriente, y por eso la impresión es de que siempre se publica lo mismo.

  2. Pues es que resulta paradójico porque las editoriales y el mercado en general, parece que rechazan aquello que se sale de lo corriente, pero de pronto llega una novela que rompe los esquemas y es todo un éxito que, a continuación, todo el mundo intenta imitar. Nunca sabes, así que lo mejor es escribir lo que te dé la gana. A veces lo original es un enfoque diferente, o una forma de contarlo distinto (por ejemplo, recuerdo Los diarios de Bridget Jones en su día y esa voz en primera persona tan personal y cercana, que abrió la puerta a un género nuevo, el chick lit ), o una mezcla de géneros…

  3. Como te indica Teresa, hay mucha novela ambientada en España. En otras épocas era distinto, cierto, no había nada. De hecho, yo escribí TRAZOS SECRETOS hace ya unos quince años (pfff, qué de tiempo ha pasado…), con esa idea de ir incorporando el tema. Parte sucede en Londres y parte en una isla oriental, pero la trama empieza, termina y tiene todo que ver con la España de Alfonso XII. Y es una novela que gusta mucho, cuando se le da una oportunidad (de otro modo no hubiera sido publicada en papel, tras años de ebook por mi cuenta), pero no conseguí despegar con ella. Aunque, pienso que, más que el hecho de que fuera española, es por no ser "novela ligera". Es romántica a la antigua usanza, vamos. Un público masivo que lee cosas como lo de los zapatos de Valeria o las obras de Sophie Saint Rose, no lee eso.
    Al margen, yo siempre intento ser original, pero creo que es un error, si quieres vender. Cada vez estoy más desalentada del rumbo que lleva la novela romántica, la verdad. Y, bueno, intentar abrirte camino, es un infierno. Arrrr ;DDDD

  4. Hola, Teresa. Gracias por tus recomendaciones. He leído a Marisa y a Nieves, del resto tengo algunas en mi lista interminable de lecturas.
    Las editoriales solo son una parte y está claro que no se van a arriesgar a hacer una inversión que un estudio de mercado les va a decir que no es rentable. Al final todo se reduce a lo de siempre, qué vende y qué no.
    Un abrazo!!

  5. Cada uno tiene que encontrar su propio enfoque. Desde luego que habrá editores que se arriesguen con determinadas historias y que les vaya bien, grandes novelas han sido publicadas por golpes de suerte en determinados momentos y gracias a la confianza depositada de un visionario (o soñador), pero no es lo común. Lo malo de la romántica, no sé si en otros géneros, supongo que también, es que cuando algo funciona se copia hasta la saciedad y no creo que eso vaya a cambiar a corto plazo.
    Gracias por pasarte, María. Un besazo.

  6. Es algo que hablo mucho con algunas amigas de letras, la opción de escribir otras cosas que sabemos que sí van a vender, pero es lo que digo siempre, yo no voy a dejar de escribir algo porque se venda peor o guste menos. Lo fundamental para mí es sentirme satisfecha y orgullosa de mi trabajo, si eso luego no tiene la repercusión esperada… bueno, es a lo que nos arriesgamos. No todas las novelas funcionan igual ni gustan igual, lo importante es seguir escribiendo y aprendiendo. Creo que los reconocimientos llegarán por sí solos.
    Muchas gracias por pasarte por aquí, Yolanda. Un abrazo!

  7. Estoy totalmente de acuerdo con este artículo, y totalmente hartande protagonistas masculinos mijeriegos, maltratadores, a los que le permiten propasarse solo por la ventaja de ser más o menos guapos y millonarios…y en cuanto a las 50 sombras de Grey" me pareció una "remake" de la noventosa " 9 semanas y media ( Kim Bassinger). En mi novela, " La prima flor" publicada en formato digital por elnsello selección bdb de Penguin Random House, intenté una historia de vida y de resiliencia, una mujer que debe volver a ser ella para poder amar y ser amada.

  8. Hola, a mí me ha pasado con Herido y No escuches al viento. Herido tiene 10 años y al principio me decían que era muy dura para la romántica y muy romántica para la narrativa normal. Más allá de las trincheras que es demasiado realista porque ocurre durante la Primera Guerra Mundial y evidentemente narro aparte de una historia de amor, cómo ocurría la vida en las trincheras precisamente. Y con No escuches al viento que tiene el tema de la trata de blancas y un psicólogo poco convencional pues más de lo mismo. Es cierto que dentro de la romántica hay un público que quiere siempre lo mismo y que no se salga de los cliches, por eso digo que mis novelas no es son para todos los públicos que leen un tipo de romántica más convencional. Pero estoy totalmente de acuerdo contigo en que hay que escribir lo que a uno le apetece también y olvidarse un poco de si va a venderlo.

  9. Yo creo que hay un público para cada historia, por eso es tan importante sentirse bien con lo que cada uno escribe independientemente del éxito comercial. Como decía más arriba, con el trabajo llega el reconocimiento.
    Muchas gracias por pasarte y comentar!!

  10. Un saludo Paola.

    Me ha encantado la entrada.

    Escribo novelas, o intento hacerlo, es algo que a penas llevo haciendo en serio y no como un simple pasatiempo, desde hace un año.

    Y en cada historia trato de hacer algo diferente. Hacer que los personajes salgan un poco de los cuadros que conocemos.

    En lo personal, estoy orgullosa de mis historias. Claro que necesitan sus mejoras. Poco a poco las voy puliendo.

    Publico mis novelas un Litnet con el seudónimo de: V. C. Aguirre.

    Un saludo y te seguire leyendo.

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