Una de las mayores piedras del camino que nos encontramos las que nos dedicamos al oficio de escribir es la productividad. Si ya es difícil rascar tiempo de nuestra vida diaria, sacarle el máximo provecho lo es todavía más. Por eso en el artículo de esta semana, te voy a hablar de las herramientas más básicas para aprovechar el tiempo y tu rendimiento sea el máximo posible.
Para organizar tu tiempo
Agenda
Parece muy simple, pero hay mucha gente que no sabe usar una agenda. Soy una loca de la papelería y desde que diseñé la Agenda para Escritoras Emprendedoras estoy deseando que termine el año para utilizarla.
Tengo la suerte de que escribir y corregir es mi único trabajo, es decir, no trabajo por cuenta ajena, por lo que yo me gestiono y decido qué tiempo voy a dedicar a cada actividad.
Para usar una agenda, primero debes apuntar las fechas importantes en el calendario anual. Lanzamientos de libros, ofertas, posts de fechas especiales, aniversarios o eventos literarios a los que vayas a asistir es lo primero que debes apuntar.



Esas fechas después se trasladan al calendario mensual, en el que ya se apuntan objetivos a corto plazo. Por último, en el plan semanal se apunta el tiempo que necesitas para cumplir los plazos del calendario mensual y anual.
En la agenda que he diseñado hay además apartados para que lleves el calendario editorial de tu blog y de tus redes, apuntes las estadísticas y tengas control de tu contabilidad.



He descubierto que la planificación por bloques me va de maravilla. Reservo un bloque de una hora diaria para escribir mi novela, después reservo otro de dos para los encargos de servicios editoriales. Por la tarde, formación, escribir en el blog, preparar cursos o publicidad, etc., asuntos que no requieren mi plena concentración porque tengo a los fieras en casa reclamando mi atención continuamente.
Para este sistema de organización, saber cuándo te cunde más escribir es fundamental. Yo no soy persona después de las seis y media de la tarde; los niños me tienen frita y las extraescolares, también. Mi cabeza solo quiere desconectar. Para mí, escribir de noche o levantarme a las seis de la mañana no son opciones porque no rindo lo mismo que a partir de las diez de la mañana.
En la Agenda para Escritoras Emprendedoras tienes además un espacio para registrar tus sesiones de escritura, ideal para saber aprovechar el tiempo.


Forest
Todo eso de planificar el día y la semana y el mes está muy bien siempre y cuando seas capaz de evitar las distracciones. Me costó mucho hacerles entender a mi madre y a mi suegra que no podían llamarme por teléfono a las once de la mañana, distraerme quince minutos cada una y pretender que siguiera mi ritmo de trabajo como si nada.
No puedo apagar el móvil por si hay una emergencia en el colegio de mis hijos, pero sí puedo evitar entrar en redes, no contestar wasaps ni mirar el correo con Forest.
Forest es una aplicación en la que si te distraes, matas a un arbolito. Te aseguro que cuando tienes un bosque más o menos mono, que se te muera da mucha rabia. Debes escoger el tiempo que vas a trabajar y ponerlo en la aplicación, a partir de ahí, si sales de ella, tu bosque va muriendo.
Es una forma de concentrarte en no mirar el teléfono bastante curiosa.
Toggl
Esta es otra aplicación de aprovechamiento del tiempo. Funciona mediante pomodoros de tiempo que tú eliges como si fuera un cronómetro. Así, puedes saber exactamente qué tiempo has dedicado a cada tarea y te aseguras de no pasarte. La única pega es que, hasta que no te acostumbras a utilizarlo, muchas veces se te olvida darle al play o al stop.
Para escribir una novela
Word
Como buena loca de la papelería, mi colección de cuadernos es bastante amplia. Los utilizo para casi todo, incluso para escribir cuando me siento bloqueada. Sin embargo, reconozco que transcribir todo eso al ordenador después es una monumental pérdida de tiempo.
He probado todo tipo de programas porque odio el Word, pero siempre termino volviendo a él. Es el más simple y fácil de usar. Y para solo escribir, sin formato y sin chorradas de diseño, es el mejor programa de edición de texto.
Escribir en Word no te distrae, es el mejor para corregir después (el control de cambios es indispensable) y el formato de sus archivos es compatible con casi todo.
Y es de lo que se trata. Escribir, escribir y escribir. Que durante el bloque de tiempo que has asignado a esa tarea en concreto solo sea para hacer eso.
Cuadernos
Que no sea práctico escribir una novela en un cuaderno no significa que no puedas usarlo para otras cosas. Tengo un montón de libretas llenas de documentación y de ideas, una como mínimo para cada novela que he escrito y tengo pensado escribir. Lo tienes todo recogido en un sitio y puedes llevarlo contigo cuando no puedas trabajar en casa.
Mucha de la documentación de Tras el largo invierno la hice mientras esperaba a que mi hijo mayor saliera del conservatorio. ¡Tiempo bien aprovechado!
Planificador de novelas
Planificar la novela romántica que quieres escribir antes de escribirla te va a ahorrar dolores de cabeza. Evitarás cambiarle el nombre a tus personajes, el color de ojos o no saber qué toca escribir después de una escena.
Toda novela necesita un mínimo de planificación previa, saber quiénes son los personajes o dónde se va a desarrollar la acción. Si eres de brújula, te vendrá bien para no perderte mientras los personajes te susurran su historia. Si por el contrario eres de mapa, te encantará poder apuntar todos los detalles que se te ocurran.
¿No sabes qué es una escaleta ni cómo planificar una novela?, ¡estate atenta la semana que viene!
Para programar tus redes sociales
Metricool
Las redes sociales son unas chupadoras de tiempo, pero lo que de verdad es un pozo sin fondo es no saber qué publicar. Mientras piensas qué vas a poner, buscas la foto, redactas el texto y lo publicas puede haber pasado perfectamente una hora (y si no, empieza a usar Toggl y asústate), una hora en la que podías haber sumado 1000 palabras más a tu novela.
Los programadores de redes son mi salvavidas. Estoy activa en mi página de Facebook, en mi grupo Yo escribo literatura romántica (al que te invito a unirte porque es muy chulo, el ambiente es muy bonico y se aprenden cosas muy interesantes), Twitter e Instagram, pero no pierdo mi tiempo todos los días publicando cosas en ellas, las programo con antelación.
El último fin de semana del mes lo dedico a dejar programadas todas las redes del mes siguiente. Entro por la noche para ver comentarios y comprobar que todo se ha publicado correctamente y poco más.
Como estas herramientas tienen funciones de pago y están limitadas, tengo que utilizar más de una para no rascarme el bolsillo. Uso Metricool para mi grupo de Facebook y Twitter. Las autolistas son lo más cómodo que hay. Voy añadiendo los posts del blog y les pongo una frecuencia de publicación, así, siempre hay contenido mío en Twitter.
Hootsuite
Como Metricool tiene un límite de publicaciones al mes, necesito otro programador para abarcar todas mis redes. Para mi fanpage uso Hootsuite, otro programador con una versión gratuita bastante apañada.
Preview
Para Instagram uso esta aplicación porque me permite ver el diseño del feed y cómo cuadrar las fotos para que quede estético y no un batiburrillo. Además, puedes dejar los textos de las fotos ya preparados y organizar los hashtags en grupos para que a la hora de publicar solo sea copiar y pegar. Te animo a probarlo.
Feedly
Programar las redes sociales para que no se te vaya la vida en ellas es primordial, pero, ojo, para no ser cansina y que tus seguidores no se vayan no puedes estar todo el día hablando de ti sin parar. Que eso está muy bien y tienes que hacerlo, pero compartir otras cosas que puedan resultar de interés para tus lectoras también es importante. La proporción del contenido que publicas debe estar en 80/20: 80 de los demás y 20 tuyo.
¿De dónde puedes sacar otros contenidos? De los lectores de feeds como Feedly. Un lector de feed es básicamente una aplicación que recoge las entradas publicadas en diferentes sitios webs.
Usarlo es muy fácil y cómodo. Haz una lista de tus blogs favoritos y ve agregándolos a Feedly. Después puedes organizarlos por temáticas: escritores, reseñas, curiosidades… Cuando te toque programar, tendrás todos los blogs recogidos en un mismo sitio y será mucho más fácil rellenar los días del calendario.
Es otro lector de contenido. Me gusta porque a veces te encuentras con artículos muy interesantes, pero que no puedes leer en ese momento. Simplemente, guardas el enlace en Pocket y lo lees cuando puedas. Tiene una extensión para Chrome, así ni siquiera tienes que salir de la página para guardar el enlace y puedes conectarlo a todos tus dispositivos.
Canva
La aplicación de diseño por excelencia. Seguro que la conoces. Tiene una versión para móvil que va regular, la verdad, pero que te saca de más un apuro si te pilla descolocada o tienes que hacer un montaje rápido y urgente.
Tiene cientos de plantillas gratuitas para todo tipo de contenidos y redes sociales y un nivel de personalización más que suficiente para el uso que le damos las escritoras.
Como ves, las herramientas que propongo son bastante conocidas, seguro que has oído hablar de ellas o ya las usas. Son las que utilizo en mi día a día, las que me permite escribir a diario, dar servicios editoriales, estar presente en las redes sociales o mantener este blog.
¡No se trata de no tener tiempo, sino de priorizar y aprovechar! ¿Cuáles son las herramientas para aprovechar el tiempo que usas tú?
Tomo nota de Preview que no la conocía. Del resto, coincido contigo excepto en el Word. Me he acostumbrado a Scrivener y es una maravilla. Lo uso hasta para el blog. Enhorabuena por la agenda. Esto deseando empezar a trabajar con ella.
Scrivener lo he probado varias veces y no puedo con él, ¡siempre termino volviendo al Word!
Muchas gracias, Pilar, espero que la agenda te ayude un montón a planificar el año. Un besazo.